(Filipenses 1:21). ¡Oh, que cada uno de nosotros pueda tener el fervor de vivir para Cristo que llenó a Pablo! Solo, en la dirección del Espíritu Santo, difundió el cristianismo en todo el Imperio Romano. No le importaba si vivía o moría, sólo quería que el reino de Dios avance. Los cristianos de hoy han desarrollado una fe falsa , una fe sin compromiso. Estamos ocupados corriendo a conferencias bíblicas retiros, buscando a los expositores más elocuentes de la Biblia y compitiendo en estudios bíblicos semanales para llenar nuestras cabezas con más bosquejos y fórmulas. Mientras tanto, millones de personas heridas en todo el mundo están muriendo sin esperanza. Somos llamados a alcanzarlas. ¿De qué se trata el compromiso? Simplemente significa dedicarnos incondicionalmente al Señor y su obra. Ceñirnos el trabajo que tenemos delante de nosotros, a pesar de las circunstancias. Significa enseñar una clase de escuela dominical todos los domingos, sin importar qué; y p...